colores de NAVIDAD

....estamos a mediados de Noviembre con sus noches mágicas de azul terciopelo y... ya se encendieron las luces de Navidad!!!!!

El Verano se despide...

.... y nos quedan los colores del Capo, nuestra segunda casa desde que el buen tiempo asoma su naricita. Incontables cafés con leche ( very relaxing, si se me permite la broma facil), risas, salsa, pintura, mojitos... amaneceres y puestas de sol azul cielo y rosa perla, pre-ci-o-sos; el va-i-vén de los balancines de madera con los pies secuestrados en una arena fina y cálida a veces, fresquita otras, pero siempre una bocanada de libertad, una gran pausita interna...

gracias otro año por tus colores, Capo

Valparaiso es de colores

Hacia mucho que no veia a Wolfgang...me llevó a descubrir Valparaiso en primavera, todo de colores!

gracias  Wolfgang por esa pausa interna tan rica !, a mi también me hizo mucho bien!

 

Me llevo  en el bolsillo tus colores, tu amor por el mar y la belleza de tus velas de América... Libertad, Cisne Blanco, Esmeralda, Gloria, Guayas, Cuauhtemoc, Miranda y Simón Bólivar!

Y sigo mi viaje en la búsqueda incesante de vientos cálidos, llenos de paz y un mar transparente y puro...

Ah buscaré Luperón, refugio  de otro marino como tú, el Almirante Cristobal Colón de los embates de las tormentas....

Tumbando por Colombia... ( Mayo 2013)

Un tremendo aguacero me recibe en la ciudad de las flores, y Medellín...

La capital paisa descana en un valle lleno de verde y Yarumos  ( hermosos árboles de hojas plateadas).

Yarumo de hojas plateadas

 Pero esa noche oscura de Mayo en la que llego , la ciudad está envuelta en bruma y lluvia, y se me antoja que me pierdo en la selva oscura, que me meto en la boca de un lobo...o de un jaguar....

 

Sólo el dicharachero Julio César, mi taxista y compañero de aventuras y desventuras los próximos 3 días, consigue tranquilizarme, y me describe las bondades y delicias de su ciudad de adopción a la cual se llega subiendo por un cerro, para luego descender en picado a uno de los valles que los españoles encontraron en su errante búsqueda del Dorado...

No se me hubiera jamás ocurrido con semejante tormenta que se abriria ante mi un valle tan lindo y verde, cuna de los primeros asentamientos de los colonizadores y lugar elegido para edificar una ciudad muy coqueta, el orgullo de muchos Colombianos, meca de las orquídeas ,ciudad natal del creador de las mujeres voluminosas ( que no gordas) más famosas del mundo, el artista Botero y del autor de una de las letras más bonitas que jamás escuché... Juanes

El Royal Bogotá será mi casa los próximos 3 dias, con sus simpáticos residentes , Don Achiles ( un perro gordote negro ébano, vigilante perruno de la entrada de todo aquel que pisa el Royal) y Sir Jerónimo ( un pececito tropical que vive en una pecerita en recepción). Estoy rendida, pero le podré al sueño porque en cuanto amanezca, pienso salir a descubir los secretos que me guarda Medellín.

Huele a Café en toda Colombia, donde el día se empieza y se acaba con un tinto, un tintico ( café, expresso desabor intenso y gran aromo, delicioso, dulce y para los más valientes bien amargo, como el cacao puro que es áspero y rudo al paladar pero de sabor profundo y delicado)

Tumbando por Medellín descubro un lugar donde sólo se permite ir descalzo, para gozar de las texturas , de las formas y de la naturaleza.. Y otro lugar ( Explora) donde lo que no está permitido es "no tocar".

Me quedo con las ganas de visitar el Orquideorama más grande del mundo ( la orquídea es la flor nacional de Colombia) y quedarme para disfrutar el festival de las flores ( silleros). Y de bailar salsa brava... pero para eso me dicen, debo irme a Calí....

 

Colombia es rojo y verde de planta de café y plata Yaruma. Y tiene aroma a trópico, inconfundible la brisa suave y húmeda, dulce y cálida , la que recuerdo de la Havanna, San José de Puerto Rico, San Juan de Costa Rica...

Al final de cada arco-iris no hay un tesoro, hay un viaje...

Vuelvo  a viajar... Entre las nubes a mis destinos inciertos, sinfín de aventuras me esperan en cada esquina...

Donde otros sólo alcanzan a ver un viaje de negocio, yo veo risas, sueños, colores, rincones mágicos, personajes únicos... Será porque nunca perdí esa dulce capacidad de ilusionarme, como los niños... que suerte la mía!

Esta niña grande vuelve a las andadas, y desempolva las notas, los dibujos y los garabatos, las direcciones secretas, los nombres impronunciables, los colores intensos y los aromas delicados que te regala cada viaje...
Y es que como diría mi querido poeta Rigo, al final de cada arco-iris no hay un tesoro, hay un viaje...

los colores del mar del norte...

el mar del norte es de grises azulados, arena y un crisol de blancos. El mar es un cristal que se confunde con el infinito y el cielo empedrado de siluetas de gaviotas  surcando los cielos. Las playas generosas se llenan en primavera de casetas para proteger del viento y disfrutar los pocos días de verano que se celebran como una fiesta...

Enero en Izegem room27

.....Como si se antojara un regreso más que anunciado, vuelvo a las andadass, a los viajes, las esperas, los aeropuertos pero sobretodo a dormir entre las nubes a la luz de las estrellas...

Un manto de nieve cubre cada calle, cada rincón de la pequeña ciudad de Izegem, los dias son cortos, cortísimos y envueltos en un halo de niebla. Acabo los dias interminables de trabajo con un pequeño paseo y descubro cada tarde un calle más bajo una lluvia de cristalitos tintineantes, como lluvia de  diamantes...

Ceno  cada noche en el mismo  bistro , La Belle, con otros viajeros solitarios, familias y alguna pareja de enamorados. Alcanzo a farfullar mis primeras palabras torpes en Netherlandais y celebro que se hablen tantos idiomas en ese lugar que es casi imposible permanecer callado... Y se hace raro cenar en silencio, a la luz de una vela, engañando a la blackberry por un ratito... y escuchando lo que el silencio me deja oir... no estoy disponible...

Las mañanas son aún más frias si cabe y descubro a  una familia de mirlos Belgas  rendondos y negros y de pico anaranjado  que decidieron quedarse a la merced  de este frio invierno  como los que se quedaron en mi jardín...